Mar del Plata como atracción turística

El 26 de septiembre de 1886 no es un día más para la ciudad de Mar del Plata. Por el contrario, es una fecha clave para el desarrollo de la misma. Aquel día del siglo XIX se produjo un hecho que cambiaría para siempre la historia de La Feliz: la llegada del ferrocarril. Este suceso fue el puntapié inicial para que Mar del Plata se convierta en lo que es hoy: la capital nacional del turismo.

En los primeros años como centro turístico, la ciudad recibía a lo que se denominaba la aristocracia o las clases altas, que arribaban a fines de noviembre y se quedaban todo el verano hasta Semana Santa. Un tiempo después, debido a algunas medidas gubernamentales que fomentaron el turismo como fueron, por ejemplo, las vacaciones pagas durante el gobierno de Juan Domingo Perón, una mayor cantidad de familias de clase social media y baja comenzaron a visitar Mar del Plata con regularidad.

Esa serie de sucesos desembocaron en la consolidación de Mar del Plata como principal centro turístico de la Argentina hace muchos años. Dejando de lado que la ciudad recibe turistas por peso propio y por el nombre que tiene a nivel nacional e internacional, ¿qué hace Mar del Plata en la actualidad para atraer turistas?, ¿funciona correctamente la promoción turística?, ¿la ciudad se encuentra en un estado que invita a la gente a venir? 

Estas preguntas son contestadas por Santiago Bonifatti, concejal del partido de General Pueyrredón y líder del partido político vecinal "Sumar". Anteriormente, fue titular del Ente de Vialidad y Alumbrado Público (EMVIAL) y también ejerció como docente universitario en la cátedra "Historia Constitucional Argentina", ya que es abogado de profesión.

En cuanto a la cantidad de turistas que alberga la localidad costera, afirmó: "Mar del Plata recibe aproximadamente 8 millones de turistas por año hace 10 o 15 años. Este número no aumenta porque no hay promoción turística. Lo que fue cambiando con el tiempo es lo que determina los ingresos de la ciudad: la cantidad de tiempo que se queda el turista. Anteriormente, la gente venía por temporada, después por mes, luego por quincena y hoy en día vienen por fin de semana. Por este motivo, a pesar de que el número de personas es el mismo, el ingreso es mucho menor porque permanecen menos tiempo".

Un ente fundamental para que la ciudad reciba visitantes es el Ente Municipal de Turismo (EMTUR). Sobre el funcionamiento del mismo, Bonifatti expresó: "El EMTUR está funcionando muy mal en sus dos actividades principales: la promoción del turismo y la administración de unidades turísticas fiscales. Además, si bien no es su responsabilidad directa, tampoco están presentes en el cuidado de la ciudad. La escollera de Playa Grande, por ejemplo, posee ratas, pastos crecidos y basura hace varios meses".

Si se habla de una ciudad turística, inevitablemente se habla de hotelería, que a través de las reservas hechas en los primeros días de diciembre, suele ser un preciso indicador de lo positiva o lo negativa que será la temporada. Sobre esta temática, el protagonista es Diego Marie, recepcionista del Hotel Ópera hace doce años. En cuanto a la temporada venidera, declaró: "En este momento (mitad de diciembre) el hotel está prácticamente vacío. Hay muchas menos reservas que en años anteriores y las que hay son por menos días. Sin dudas, es la peor temporada veraniega desde que trabajo aquí".

Por la función que ocupa, está en constante diálogo con el turista. "La principal queja que manifiesta el turista no es en el sector económico, sino que es la suciedad en general de la ciudad. El ámbito gastronómico no le parece caro a la gente pero sí muestra su descontento con los precios de los estacionamientos, del alquiler de carpas y de las entradas a los teatros", mencionó el trabajador hotelero. 

A diferencia del concejal, Marie tiene una opinión positiva del EMTUR desde su lugar. "El EMTUR se comunica telefónicamente para consultar ocupación y preguntar si tenemos habitaciones disponibles. Ante alguna duda propia o de un cliente, suelo llamar a turismo y siempre me atienden muy amablemente y resuelven la situación", manifestó.

Por último, desde el lado del ciudadano común, prestó su declaración Rosela Juárez, estudiante de Bioquímica que vive en Grand Bourg, Buenos Aires, y que visita Mar del Plata con su familia desde chica. "Vengo desde muy chica con mi familia y siempre me pareció una ciudad muy linda. Actualmente tengo 24 años y percibo algunos cambios con respecto a años anteriores en cuanto a la cantidad de gente. Por ejemplo, nosotros solemos ir a las playas de Punta Mogotes y lo que es la salida en auto de los balnearios hacia Avenida De Los Trabajadores siempre era un embotellamiento constante. En cambio, en las últimas veces que vinimos noté que eso ya no pasaba. Otro aspecto que siempre estuvo presente y que creo que puede atentar contra la intención de venir a la ciudad de las personas es la suciedad, sobre todo en las playas", contó.

Mar del Plata es una ciudad bella por naturaleza y reúne todas las condiciones para ser el principal centro turístico de la Argentina, pero desde el gobierno municipal y provincial no deben confiarse en que la gente visita la ciudad por ser Mar del Plata en sí, sino que deben trabajar en brindarle al turista motivos reales por los cuales debe elegir La Feliz para sus vacaciones.